La diabetes mellitus tipo 2 es una enfermedad con un factor altamente hereditario; cuanto mayor es la cantidad de familiares con diabetes que tiene una persona, mayor será la posibilidad de padecerla.

El consumo abundante de azúcar, grasas y alimentos procesados, aunado a la escasa ingesta de fibra y llevar una vida sedentaria, resultan en el desarrollo de obesidad, que combinada con factores hereditarios, conllevan finalmente a padecer diabetes.

Usted debe darse cuenta que la diabetes tipo 2 no es un castigo, sino la consecuencia de la herencia y de los malos hábitos, los cuales se pueden modificar con empeño y disciplina. Debe empezar por usted mismo para lograr su propio bienestar y así, poder darle el ejemplo a su familia evitando el desarrollo de la misma en sus hijos o nietos.

La diabetes NO SE CURA, pero puede controlarse. Usted debe tener claro que cuanto mejor se cuide desde el momento de su diagnóstico, mejor será la calidad de vida que tenga, evitando así complicaciones que pudieran llegar a ser fatales.

La diabetes no es un impedimento para llevar una vida normal, la clave está en tener una adecuada educación en cuanto a su condición y cambiar o mejorar sus hábitos.

Si me siento bien, ¿por qué debo tomar medicamentos?

La diabetes tipo 2 es muy difícil de identificar en etapas tempranas debido a que puede no generar ningún síntoma y sea completamente silenciosa. Sin embargo, ya desde este momento empieza el daño a los diferentes órganos, principalmente riñones, ojos, corazón, nervios y circulación. Ésta es la razón por la que usted debe ser muy estricto en el control de su glucosa desde el momento de su diagnóstico.

El hecho de sentirse bien no siempre significa que usted está bien o que sus niveles de glucemia son adecuados, es por esto que es necesario usar medicamentos que mejoren la función de la insulina y que son de gran ayuda para lograr un control adecuado.